El fieltro es adictivo, ¿lo sabíais?. Entre los colores vivos que tiene, que no se desfleca ni se retuerce al coserlo y que es barato y fácil de encontrar, para mi es la tela perfecta para enredar y aprender a hacer cosas.
Pues bien, fruto de esa adición han salido unas cuentas marionetas para que juegue mi hijo con ellas. Un día que fuimos a Ikea las vio y le encantaron, pero yo quería que conociera más animalitos que los pájaros que ve en el parque o el gato y el perro a los que persigue cuando viene mi suegra de visita, y no es que sea muy fácil a día de hoy en Madrid capital ver cerdos y vacas todos los días como nos pasaba a los que nos criamos con abuelos que vivían en el campo ;-)
Empecé con los más fáciles como un pingüino o un pollito, pero pronto le fui cogiendo el gusto y el tranquillo y éste es el resultado:
Alguna en detalle:
Ánimo y haceros las vuestras!!
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